Franqueando Resistencia Cromática

Polifranquearte: Programa de Investigación

  Después de conocer el discurso propuesto por el comisario de la exposición Andrea Perissinotto, hoy nos proponemos a conocer a los protagonistas y las obras detrás de esta propuesta de energía del color.  Previamente al finissage el próximo sábado 14 de septiembre. 

Alejandro Muñiz

Se podría pensar que el título de tu obra Endogamia, son los matices de una misma especie... ¿Es una endogamia policromática?

Si, son los matices de una misma especie que comparten color y gesto o trazo gráfico. Es una endogamia Policromática.

¿Qué te inspiró para crear Endogamia?

Más que una inspiración fue una pulsión visual interior basada en mi "infinita fe" en la confrontación, combinación y versatilidad del color con el dibujo y una fijación técnica con el formato cuadrado.

¿Cuál es tu grito/tu discurso en resistencia cromática?

Que no pare el color.

 

 

Eva Zaragozá

¿Cuál es tu grito/tu discurso en resistencia cromática?

La obra que expongo. Arte e imaginación con alegría y atención.

Si el color grita, se muestra histérico en tus obras... ¿Qué tipo de estímulo llenó de histeria los colores de tus obras, que buscas decirles a los espectadores ante ella?

Lo de histérico viene porque, al finalizar las prácticas artísticas que guío en mi estudio Fosforita Madrid, trato de aprovechar los restos de pintura que han sobrado sobre los diferentes soportes que estoy trabajando a la vez. Esta urgencia nada tiene que ver con el tiempo del proceso de cada obra, sino con la presión de encajar algo no previsto en una pintura, sin premeditación y ante otras personas. Luego, continuo, o no, en cada uno de ellos y este tiempo, puede durar más de un año. Los Estudios histéricos de color son como ejercicios donde encuentro fórmulas, experimento con lo que creo que sé, descubro un lenguaje que me produce mucha satisfacción.
En cuanto al efecto que quiero provocar, pretendo la excitación, como me excita a mí la pintura. Quiero que se enreden, que se pregunten por qué. Mis cuadros son un detonante para que el propio  espectador construya su discurso o que simplemente los sienta, como se siente la ciudad cuando se da un paseo por ella.

Pintura o Performance ¿Qué es primero para el ser artístico de Eva?

Me hacer gracia lo de ser artístico, casi me siento más cómoda imaginándome como estar artístico, es decir, que tomo yo la decisión, que no soy sino que estoy así porque quiero. En mi día a día tomo decisiones desde esta posición de artista, desde que decido levantarme hasta cuando decido la hora de irme a la cama y sobre todo la forma en cómo hago las cosas, esta forma de hacer es mi yo artista. No hay forma para definir qué es más importante, cada día es una cosa distinta. Por lo tanto, en cuanto a qué faceta va primero pues es todo a la vez, vida y arte están mezclados, no hay jerarquías, no hay división, todo está unido, incluso se podría incluir pintura, performance, educación, ir a la compra y tomar un café con un amigo. Me gusta mucho hablar de juego también, de asimilar arte a juego. Yo vivo porque juego.

Greta Hammond

La presencia de 2 ambientes vibrante de emociones como son un patio con pájaro y un herbolario con un costurero, transportan a cualquiera a vivencias del hogar lleno de colores, aromas y recuerdos... ¿esa policromía de herbolario de manera tríptica tiene algún recuerdo o vivencia personal plasmado en él?

Pienso mi taller como un jardín, un espacio lleno de objetos que forman parte de mi vida. Suelo coleccionar estos fragmentos y a veces los utilizo como modelos para mis pinturas.

En el caso de herbolario y costurero existe una fusión rara entre estas dos cosas: por un lado se muestra el florecimiento de una planta y por otro, botones, agujas, formas abstractas que quedaron en un costurero sin uso y que guardo con cariño.

Me maravilla pensar la vida en relación a estos signos materiales que están cargados de recuerdos, memoria y una visita constante al pasado.

En Pájaros en invierno también hay una fusión contrastante entre la calidez interior del taller y el frío invernal del afuera; las aves serían esos mediadores entre estos dos ambientes, aquellos que dan vida al espacio, aparecen de pronto y golpean la ventana. Con esta pintura quiero guardar como en una fotografía esos instantes, creyendo en la fragilidad del tiempo y la solidez de los espacios.

 ¿Qué sensación percibiste cuando estabas creando la de pájaro en invierno?

Pinté esta serie desde mi estudio en la Patagonia Argentina. Aquí el invierno esta lleno de matices, detalles, sensaciones, colores neutros adornando el paisaje, luces cálidas sobre la montaña al final del día...

Cuando nieva queda en el aire un silencio infinito; se escuchan voces de niños jugando en el patio de al lado del taller y pájaros. Pájaros que vienen cada año desde lugares diversos, cruzan la cordillera y llegan hasta mi ventana. La obra contrasta con este paisaje porque la paleta que utilicé es muy vibrante; esto habla de una pulsión vital en la pintura, de la necesidad de dejar el rastro de algún instante que el ojo capta, lo traslada al lienzo y vuela mas allá de las estaciones y las geografías.

¿Cuál es tu grito/tu discurso en resistencia cromática?

Uno de los puntos más fuertes de Resistencia Cromática es la formación de un colectivo que comparte una tarea dedicada y pasional sobre el uso del color. Mi aporte llega desde el sur del mundo y se une a esta resistencia para generar diálogos abiertos, contrastar materiales y metodologías de prácticas artísticas, reivindicar el valor de la pintura en la escena actual y unirnos en ansias de libertad. Coincidimos en proyectar un arte que para cada uno de nosotros resulta inseparable de nuestras vidas.

 

 

Luis Sanz

Captar una onda sonora y plasmarla en un lienzo a full color representa una sensación fuera de serie. ¿Qué sonidos podríamos interpretar en tus obras?

Imposible no poder reproducir las palabras del escritor Javier Puebla para esta pregunta:

“Doy varias vueltas entre los cuadros, mirando, mirando y escuchando. Porque aquello suena, y suena muy bien: a alegría de vivir. Sí, eso es a lo que suena la obra de Luis Sanz: a alegría de vivir; el mejor dj pintor que nunca he visto.“

Personalmente mis sonidos son.. onomatopeyas, exclamaciones , sonidos bellos y frecuencias sensuales. Delicadas líneas que transmiten tranquilidad y sosiego a la vez que a furia desatada y ganas de comerse el mundo.

¿Existe alguna clave musical que te inspiró la manifestación de colores para representar tus obras?

Todas las frecuencias y sonidos expuestas no dejan de ser una transcripción gráfica y de color de mis propias vivencias.. un cuaderno de bitácora gráfico de mis vivencias y emociones fuertes.

Tanto por color como por forma. Mi vida es música y no la concibo si ella.

Al igual que a Jean Paul Gaultier el color rosa nos hace sonreír, por ese motivo nunca falta el color rosa en mi obra. Es un regalo extra que nos ofrece el maravilloso poder del color.

¿Cuál es tu grito/tu discurso en resistencia cromática?

Mi grito claramente es..  que La vida es Color y Sonido!!!

Creemos.. Pintemos, Dibujemos y Manchémonos de colores para que todo tenga sentido. Todos y todo somos vibración, color y música. ¡Todo lo demás  sobra!

María Hi San

 Tus característicos  retratos reflejan la sensación de dolor silente,  parece que lloran, pero en resistencia cromática vemos un contraste hacia la naturaleza, lo orgánico del color; ¿Podría ser un paso a la armonía, a la curación de ese dolor?

Efectivamente hay un cambio. Cuando empecé con los retratos de mujeres trataba de capturar la sombra y lo inconsciente, lo que no se aprecia a simple vista al mirar a una persona, trataba de ver los miedos, tristezas y rabia; ese cajón de sastre que cada uno lleva dentro y prefiere nos mostrar, claro que era una interpretación de lo que a mi me transmitía.

En Resistencia Cromática, esta obra que comencé hace un año, fue en busca de la armonía, como bien expones en tu pregunta, en busca de la paz interior y el zen. Indagando e inspirándome al principio en la vida submarina, los bambúes, en haikus y Osho.

Los anteriores proyectos tenían mucho peso y relación con el dolor, partían de ahí (para su transformación), en este caso, es justo lo contrario; parte de la vida y si lo considero un paso hacia la curación.  Aunque en la vida surjan nuevas heridas, también hay curaciones continuas, que forman parte de la vida.

¿Qué mensaje hay detrás de tus obras?

Pues para mi, es una reconciliación con la belleza, busco el equilibrio de color y formas simples, en el color encuentro la vida y tranquilidad. Incluso en el proceso hay otro tempo, hay una lentitud en la construcción  y un acercamiento hacia lo sutil.

¿Cuál es tu grito/tu discurso en resistencia cromática?

Es una llamada hacia el respeto, la calma; queriendo llegar al contento, el placer y la satisfacción , resumiendo el significado que encierra la belleza, ese encantamiento sensorial, intelectual o espiritual. Viveza y liviandad.

Miguel Unamuno Vera

El prisma cuántico de tu obra nos teletransporta a una senciación futurista en cuanto adelantarnos a la época. ¿Existe alguna idea o ansia de futuro en tus obras?

No diría que mi propósito sea representar el futuro. Tal vez sí la búsqueda de algo nuevo que va más allá de lo ya existente, pero mi objetivo es sobre todo representar el presente. Aunque puede ser que de alguna manera todos busquemos una especie de inmortalidad y permanencia en el futuro, pero supongo que esa es otra cuestión.

A lo largo de la historia en cada época o lugar el arte ha sido un reflejo de la evolución de los procesos sociales y culturales que a su vez han originado la creación de sucesivas corrientes artísticas y formas de representar la realidad de cada momento, gracias también al consecuente desarrollo e innovación de nuevos materiales y técnicas artísticas. 

La figura humana y el rostro han sido siempre, desde los orígenes de la humanidad, los símbolos que han servido para escenificar las creencias, expresar la visión del ser y construir el universo de lo sobrenatural o lo cotidiano, para dejar constancia, intercambiar, transmitir sucesos y apreciaciones de su quehacer y modo de vida. De aquí viene mi interés por simbolizar a través de estas cabezas cuánticas la sociedad actual, y quizá sí como un referente y proyección para el futuro.

¿Qué hizo que representaras lo cuántico en esa presencia tan prismática de tus obras?

Es el resultado de la situación en la que observo que se encuentra la sociedad actual de la información y la tecnología en la que los estados y las grandes corporaciones se dedican a hacer acopio de datos privados de todos los ciudadanos. Hemos llegado a un punto en el que toda esta colosal e ingente acumulación de datos solo produce una descomunal redundancia de información difícil de analizar, una maraña de ruido que acaba difuminando las ideas, confundiendo los mensajes y tergiversando la realidad, convirtiendo a las personas en meros algoritmos matemáticos, y que aplicado a las teorías físicas actuales, se acabaría convirtiendo en un caos de ondas o curvas cuánticas, generando una multitud de formas amorfas y confusas. 

En la serie Cabezas cuánticas represento mediante estas hipotéticas ondas cuánticas un personaje actual, anónimo, indefinido, impreciso, conformado por un cúmulo de seres semejantes pero diferentes, originando una figura borrosa, desdibujada y sin rasgos que la identifiquen, anulando así la individualidad e identidad personal. 

¿Cuál es tu grito/tu discurso en resistencia cromática?

El trabajo artístico habitualmente es muy solitario, por lo que realizar una exposición conjunta con un grupo de artistas, a los que además nos une una larga amistad, es una oportunidad excelente para poder expresar mediante el estilo personal de cada uno las inquietudes que nos vinculan. Preparando esta exposición he experimentado sobre todo un sentimiento común, que ha sido la necesidad de proferir nuestro grito de color y manifestar la poderosa vitalidad de la pintura.